¿Cómo limpiar horno con bicarbonato? La GUÍA MÁS COMPLETA


limpiar horno con bicarbonato

La mejor manera de limpiar un horno de una forma casera y con productos caseros es usando la mezcla mágica de bicarbonato de sodio y vinagre. Es posible que haya aprendido sobre esta mezcla ya en la guardería, donde a menudo se usa para presentar a los niños el concepto de reacciones químicas en un entorno inofensivo.

La reacción química que lo convierte en el mejor limpiador

Cuando el vinagre (un ácido) y el bicarbonato de sodio (una base) se encuentran, reaccionan químicamente juntos, dando como resultado burbujas y espuma.

En la primera reacción, la reacción a base de ácido , los iones de hidrógeno en el vinagre reaccionan con los iones de sodio y bicarbonato en el bicarbonato de sodio. 

Esto da como resultado dos nuevos compuestos: ácido carbónico y acetato de sodio. En la segunda reacción, que es la reacción de descomposición , el ácido carbónico recién producido se descompone en agua y gas de dióxido de carbono, haciendo que surjan burbujas y espuma.

La combinación de bicarbonato de sodio y vinagre se puede usar para debilitar y ablandar la grasa y la mugre del interior del horno, lo que facilita su eliminación. Si te preguntas cómo limpiar elhorno con bicarbonato , nuestras instrucciones paso a paso te ayudarán.

Paso 1: vacía tu horno

El primer paso para limpiar su horno con bicarbonato de sodio es vaciarlo completamente, dejando a un lado las bandejas, parrillas y platos del horno. Estos los limpiaras por separado.

Paso 2: Quita los restos de comida

Si hay migajas o pedazos quemados de comida en el horno, usa una espátula para rasparlos. Apunte solo a la suciedad suelta: lo que esté pegado a las paredes, suelo o techo del horno se eliminará más adelante.

Paso 3: Haz una pasta de bicarbonato de sodio

En un tazón normal de tu cocina, mezcla 8 cucharadas de bicarbonato de sodio con 3 cucharadas de agua hasta obtener una pasta solida. Si tienes un horno muy grande o si estás limpiando varios hornos a la vez, puedes considerar duplicar, o incluso triplicar, las cantidades. No se preocupe si su pasta no es 100% consistente en textura.

Paso 4: Tapa bien el interior del horno

Toca sacar esos guantes llenos de polvo que nunca has usado y cubre las superficies internas con una esponja, usando las manos y los dedos para que se pegue la pasta en cada rincón y cada grieta. Presta especial atención a las áreas particularmente grasosas.
 A medida que frotes la pasta, notarás que se volverá de un color parduzco debido a la suciedad que absorbe, así que asegúrate de proteger tus manos y tu ropa

Paso 5: deja que la pasta se asiente durante la noche

Como parte de la grasa y la mugre que hay dentro del horno puede ser bastante terca, dejar reposar la pasta de bicarbonato de sodio durante al menos 12 horas producirá los mejores resultados. Si bien esta mezcla mágica hace su trabajo, puede continuar con su día o descansar bien por la noche.

Paso 6: Quita la pasta

Después del período de trabajo de 12 horas, toca ponerse los guantes, agarrar un paño húmedo y limpiar la pasta seca lo mejor que puedas; considere usar una espátula para raspar la pasta de las esquinas difíciles de alcanzar. 

Paso 7: El retoque final con el vinagre

Pon un poco de vinagre en una botella con rociador de agua y rocíelo sobre las superficies interiores del horno. La reacción química entre el vinagre y el bicarbonato de sodio producirá espuma y burbujas, lo que aflojará la suciedad sobrante e identificará cualquier residuo de pasta.

Paso 8: La limpieza final

Toma un trapo húmedo y limpie las áreas espumosas restantes del horno. Rocía y limpia el vinagre hasta que tu horno se vea tan limpio como nuevo.